Foto: Special Olympics
El equipo de Plena inclusión Ceuta participante en el VII Campeonato Nacional de Fútbol 7 Unificado, y su defensa Said Abdel Lah, protagonizan un apartado en una publicación de Special Olympics Europa Eurasia y que se distribuye por todos los países de la región ‘Europa Eurasia’. Además, el reportaje ha sido publicado en la página web de esta prestigiosa organización.
Esta publicación está dedicada a la Semana Europea de Fútbol, en la que está enmarcada el VII Campeonato Nacional de Fútbol 7 Unificado en el que participó el equipo de Plena inclusión Ceuta consiguiendo, por segundo año consecutivo, la plata.
Aquí puede ver la entrevista: http://www.specialolympics.org/Regions/europe-eurasia/News-and-Stories/Stories/In-Spain,-a-Special-Olympics-Footballer-is-a-Defensive-Wall.aspx
http://www.specialolympics.org/SimpleStories/SimpleStory.aspx?id=42765
Detrás de cada jugador hay una historia y algunas de ellas merecen ser contadas. Es el caso de Said Abdel Lah, cuya vida es un largo campeonato en el que, partido a partido, ha ido consiguiendo éxitos.
Su carrera como futbolista amateur comienza con su llegada a Plena inclusión Ceuta, asociación a la que llegó en 2005. Pero en estos doce años, Said ha cambiado mucho y en su proyección, el fútbol, como elemento de cohesión social, ha jugado un papel muy importante.
Said, de 34 años, nació en Ceuta y su infancia y juventud las pasó en el barrio del Príncipe. Solo hablaba dariya –dialecto árabe-, no había ido al colegio y el único trabajo que había tenido era el de pastor de cabras. Apenas tenía vida social.
En Plena inclusión Ceuta aprendió el castellano y comenzó a hacer deporte, concretamente a practicar fútbol-sala, natación y atletismo. Said comenzó a trabajar en Servicios de Limpiezas Apros (Centro Especial de Empleo de Plena inclusión Ceuta), donde hoy continúa con un empleo estable desarrollando su labor en el Instituto de Enseñanza Secundaria ‘Almina’. Entonces tuvo que elegir deporte porque el tiempo libre no le permitía más. Escogió el fútbol.
En la actualidad entrena lunes y miércoles en el ‘José Benoliel’, un campo de fútbol que se encuentra justo al lado del centro educativo en el que trabaja.
“Al principio estaba en el banquillo”, comenta, pero con los entrenamientos se ha convertido en un pilar del equipo, un muro en la defensa, hasta el punto de haberse ganado el apodo de ‘Puyol’ y haber lucido el brazalete de capitán en el segundo encuentro que su equipo disputó en el VII Campeonato Nacional de Fútbol 7 Unificado. Said se caracteriza por cortar numerosos balones y parar los ataques rivales. “O pasa el balón o el hombre. Uno de los dos no puede pasar”, bromea, y añade que en las labores defensivas le gusta ser la sombra de sus rivales. “Que los delanteros no respiren”, dice sonriendo.
Por sus palabras, se puede decir que también se parece a Puyol por su educación y su deportividad. “Después termina el partido y todos somos amigos. Vamos a saludarnos y a darnos un abrazo, porque el fútbol es para divertirse, para conocer gente y hablar con los demás jugadores”, apostilla.
Y es que el fútbol también le ha permitido conocer parte del territorio nacional, ya que ha viajado a Málaga, Villarreal, Los Barrios o La Línea. En estos dos últimos lugares participó en los Juegos del Estrecho, en fútbol-sala, cita deportiva que también le llevó otro año a Gibraltar.
Ha participado ya en tres ediciones del Campeonato Nacional de Fútbol 7 Unificado, consiguiendo el subcampeonato en las dos últimas. En la última participación rozó el campeonato, cayendo en la tanda de penaltis. “Fuimos para ganar, pero no pudo ser… Mala suerte. Si pierde el Madrid, nosotros también podemos”. Hace referencia al equipo merengue porque es su favorito. Aunque le comparen con Puyol, su ídolo es Sergio Ramos. De hecho, se fija en él y asegura que cuando ve la ocasión, sube a rematar.
Said es también un joven optimista, y quiere volver a participar “para quedar primero”, aunque insiste en que el fútbol es “para pasarlo bien”.
Donde sí se ha proclamado campeón es en su vida, donde asegura ser feliz y disfrutar mucho con todo lo que hace. En la actualidad vive en un piso solo pero visita a diario a su madre quien, asegura Said, también está muy feliz de verle bien. “Está contenta. Ella y el resto de mi familia. Solo quieren verme feliz, y lo estoy”, asegura.
Su deseo es continuar jugando al fútbol y, por su puesto, al lado de su actual entrenador, Antonio Bel. “Con él, hasta la muerte”, dice con la sonrisa que le caracteriza. El equipo de Plena inclusión Ceuta tiene defensa para años y el Campeonato Nacional de Fútbol 7 Unificado, un fiel participante.